Acerca de "La sociedad del espectáculo” a primera vista parece ser proyecto absurdo, es decir todo esos elementos encontrados sin orden, ni tiempo, que van al mismo ritmo. Debord hace una selección de
fragmentos de su libro, que son recitados por su propia voz, mientras que nosotros a la vez podemos ver en la pantalla que aparecen imágenes, más o menos relacionadas con el
texto, sustraídas de diversas fuentes aleatorias: fragmentos de conocidas películas, noticiarios, anuncios
publicitarios, imágenes eróticas, etc.Todo esto tomando como una posibilidad artística y a la vez política de tomar algún objeto creado por el capitalismo o el sistema y distorsionarlo, y que su uso original se vuelque en uno completamente critico ante nuestros ojos, pero que posiblemente a primera vista pase desapercibido, es decir tergiversar toda la información. En todo caso es este discurso oral lo que se torna principal en toda la película y aunque las imágenes guardan un mensaje subliminal, pasan a segundo plano completamente, esto básicamente para describir el video como tal.
Tras todo esto podemos ver claramente las ganas del autor por evidenciar el creciente consumismo en la sociedad, el espectáculo de una representación, representación de nuestra realidad consumista, deshumanizada y automatizada, finalmente se puede entender el interés por la reflexión, a la actitud desbocada, descontrolada y vacía en que la sociedad dirige la historia.
Tras todo esto podemos ver claramente las ganas del autor por evidenciar el creciente consumismo en la sociedad, el espectáculo de una representación, representación de nuestra realidad consumista, deshumanizada y automatizada, finalmente se puede entender el interés por la reflexión, a la actitud desbocada, descontrolada y vacía en que la sociedad dirige la historia.
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